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Muchas veces me habéis preguntado si las niñas ven la tele, sé que es un tema espinoso y muchas veces me han llamado radical por mi opinión al respecto: Creo que la televisión es perjudicial para los niños  pequeños. Es mi opinión y actúo en consecuencia. Tenemos una televisión en casa, pero no está conectada al tdt. No vemos la tele. Alguna vez vemos algún partido de fútbol con el proyector en la pantalla y en ocasiones vemos películas en familia. Sobre todo del Estudio Ghibli, de protagonistas femeninas y con carácter, tengo pendiente haceros una selección porque son preciosas. Un par de veces en 3 años hemos visto alguna peli solos. Todo llegará. Mi mantra es «los días son largos, los años son cortos» 🙂

No me gustaría empezar sin resaltar que este artículo no es en absoluto un intento de culpabilizar a nadie. Sé, por experiencia, que a veces es muy dífícil tener presencia continua para nuestros hijos (Sobre todo si tienes dos o más, si duermen poco, si son intensamente demandantes, si no están escolarizados, si trabajamos mucho…). Cuando nació Emma, me quedé sola con un bebé que aún no tenía dos años y un bebé de 4 días, con cólicos y reflujo, una lactancia muy muy complicada (que solucionamos con cirugía, no os digo más) y una casa que atender sin ayuda extra. Vimos mucha tele esas primeras semanas. ¿Me arrepiento? En absoluto, es una herramienta más que tuve la suerte de utilizar en un momento que lo necesitaba. ¿Era lo que necesitaba mi hija para su desarrollo cerebral? Esta claro que no, era lo que YO necesitaba. ¿La perjudiqué? Lo dudo mucho, la veíamos juntas mientras Emma tomaba teta, la única alternativa que se me ocurre hubiera sido desatender a Emma o mandar a Abril a la guardería. En esa disyuntiva, bienvenida sea la tele. Espero que haya quedado clara mi postura desculpabilizadora 🙂 Cada familia y cada niño son distintos. «Seguid al niño» decía María Montessori. Ésta es mi opinión al respecto de la televisión en un contexto determinado que es mi familia. Soy flexible, en casa de los abuelos ven la tele y no tengo nada que decir al respecto. Éste el último mes hemos puesto dos pelis, un día que vino una amiga a vernos y Abril se aburría y otra noche que su padre llegó tarde de una reunión y tuvo que seguir trabajando después de cenar. No busco polémicas, pero algunos me preguntáis como llego a todo sin tele y éstas son algunas ideas que puedo ofreceros.
La idea principal sería tener un ambiente preparado para ellos, que incluyera distintas actividades. No tiene porqué ser Montessori en sentido estricto. Montessori es un espíritu, más que un conjunto de materiales. Sería ideal incluir al menos estos cinco rincones:

  • Un rincón de manualidades: Pinturas, troqueladoras, plastelina…
  • Un rincón de juego simbólico: Cocinita, coches, muñecas, playmobil…
  • Un rincón de lectura a su altura: Con libros que les gusten y adecuados a su edad.
  • Un rincón de aprendizaje: Con actividades para aprender jugando que pueda elegir y luego recoger por si mismo. No tiene porque ser caro o elaborado: clasificar pompones en hueveras, trasvasar lentejas, puzzles… 
  • Un rincón exterior: Si tenéis espacio, organizad un ambiente preparado de exterior con agua a raudales, ¿un pequeño balcón? compra un mesa de agua y arena pequeña y plegable; ¿un gran patio? incluye además actividades de mucho movimiento.

Alternativamente se me ocurren estas ideas:


  1. Leerles un cuento (o un millón). Salvo que estén muy enganchados a la tele, los niños adoran que les leamos cuentos. Lo  mejor es que los elijan ellos y que se sienten en nuestro regazo y pasen ellos mismos las páginas, así nos aseguramos que han terminado de observar todas las ilustraciones y les damos un papel activo y no pasivo en la lectura. Poner caras muy expresivas y voces graciosas funciona para los más chiquititos.
  2. Cuentos grabados en un cd. ¡Algunos niños adoran tanto leer que los padres acabamos agotados! Me regalaron unos audiocuentos y enseñé a Abril a usarlos en la minicadena. Le encantan! 🙂 Aprovechó para pediros si conocéis algún sitio donde se puedan conseguir más gratuita y legalmente 🙂
  3. Sesión de cosquillas y juego bruto. A veces empiezan a ponerse nerviosos y no sabemos como dar salida a esa tensión que se va acumulando y tu intuición de padre te avisa «peligro, peligro, rabieta a la vista». En casa tenemos dos métodos para frenar esta espiral: La  tendencia hardcore, con hijas que salen volando en dirección a la cama y la dramamamá cierra los ojos pensando en brazos y piernas rotas; y la tendencia flowerpower, más de damiselas, con cosquillas por todo el cuerpo. y alguna voltereta como exceso. En ambas hay muchas risas y un ambiente relajado instántaneo 🙂 El juego bruto es súper importante para que luego distingan entre agresión y simple juego agresivo (la diferencia es fundamentalmente que alguien deje de pasarlo bien)
  4. Salir a dar un paseo con botas de agua. Si la cosa se empieza a poner tensa en casa, salid a la calle. En verano es más fácil, pero cuando llueve en invierno da mucha pereza. Comprad ropa y calzados adecuados y emulad a Peppa Pig. Si, sé quién es Peppa Pig. Y me encanta su acento (lo vemos en inglés) y la pachorra de su padre, me recuerda a alguien que conozco ¿Véis cómo no soy nada radical? 😛
  5. Actividad chulichuli en familia: Una manualidad, una actividad de ciencia, juego sensorial… Para esto hay que estar despejado, de buen humor y nada cansado. Asumir previamente que el tiempo invertido en preparar una actividad suele ser directamente proporcional al tiempo que les entusiasma, para evitar frustraciones nuestras más que nada.

    Cua
    nto más simple, mejor. Las actividades «open ended» (poco estructuradas, de final muy abierto) son las mejores si estamos cansados.

  6. Construir con clemmy, con lego, con construcciones de madera, con geomag,…. Aunque sean aún muy pequeños para hacerlo solos, les encanta observar como manipulamos los bloques. Aquí también tenemos secciones: La vertiente arquitectura e interiorismo de mamá, la vertiente ingeniería aeronáutica y armamentística de papá y la sección destrucción total protagonizada por Brizzilla y EmmaZinger 😛
  7. Preparar un picnic, real o imaginario. Una vez a la semana hacemos un picnic, preparamos el relleno, tostamos pan, lo untamos, hacemos sandwiches, los metemos en una cestita y hemos «gastado» toda la mañana.

    Si no tenemos tanto tiempo, una cesta de picnic con comida de madera es uno de los juguetes de juego simbólico que más le gustan a las niñas. Tengo pendiente poneros unas fotos. Hacen picnics en cualquier lugar y con cualquier excusa 🙂 Y parece simple juego de niños pero están poniendo en práctica un montón de destrezas.

  8. Que nos ayuden a preparar la comida. Muchos padres me cuentan que aunque han reducido la televisión, la siguen necesitando para poder cocinar si están solos. Lo entiendo, es muy complicado llegar a todo, pero si el niño muestra interés (no todos lo hacen), anímales a que cocinen contigo. Algunos querrán participar en todo, otros querrán observar sin tocar nada y otros simplemente querrán estar con nosotros, aprovechad para explicarles lo que estáis haciendo. Cocinar con los pequeños porteados en la espalda es también muy bonito.
  9. Que nos ayuden con las tareas de la casa. Otro momento indispensable de tele para algunas familias. Igual que en el anterior, SÓLO si el niño muestra interés, proponles que te ayuden a limpiar, poner lavadoras, fregar platos,… Escobas y fregonas tamaño mini y líquidos de limpieza no tóxicos (vinagre diluido y jabón suelen funcionar bien) y tendréis pequeños ayudantes.

    Al principio dan más trabajo del que quitan, no esperéis un robot de limpieza, pero al menos están entretenidos 🙂

  10. Poner música y bailar juntos. No sé si conocéis el libro «El cerebro del niño», os lo recomiendo encarecidamente, ayuda a entender desde una perspectiva científica la mente de los niños. Propone movimiento cuando empieza a colapsarse la amígdala y funciona a la perfección. Si estamos con más niños en el parque y los conflictos de propiedad empiezan a irse de las manos, siempre propongo jugar al corro de la patata o al patio de mi casa. Los niños se mueven, los cuerpos se relajan y el ambiente se calma. La quinta vez que lo bailamos intento hacer mutis por el foro. No lo consigo mucho. En casa también bailamos locamente -afortunadamente no sólo el corro de la patata-. Es muy desestresante.Y quema calorías 🙂
  11. Sesión de mimos, masajes y caricias. A veces empiezan a ponerse nerviosos porque no les estamos prestando atención y una sesión de caricias puede frenar una tarde de rabietas. Cuando estoy muy cansada le pido a Abril que me acaricie el pelo o jugamos a las peluqueras. Le encanta y nos relajamos las dos. A veces me duermo, pero no os preocupéis un chillido en el oído «mamaaaaaa que te estás quedando sobadaaaaa» lo soluciona.
  12. Jugar a doctoras y enfermeras. Éste le tengo para esos días de agotamiento extremo. Durante los meses de deprivación del sueño lo use mucho. Sacábamos el maletín de médico, me tumbaba en la cama y me cuidaban. Me ponían vendas y me daban medicinas. Me trataban con mucho amor, bueno Emma a veces se tiraba en plancha encima mía pidiendo teta, pero en general es un juego tranquilo y muy dulce. A veces me dormía, pero me remito al punto 11.
  13. Cantar canciones, las que llevan gestos, repetición y mucho movimiento son las mejores. Por eso triunfan tanto los cantajuegos 🙂 Yo los odio pero me sé las canciones y las cantamos. Una vez canté 34 veces «Soy una Taza», fue mortal. Tuvé ganas de ponerles la tele, pero me contuve, me hubieran pedido «Soy una Taza» y me hubiera desmayado, aunque me hubiera remitido al punto 11 de nuevo 😀
  14. Darnos un baño de espuma. Para que se bañen juntas tengo un asiento de bañera para Emma y no suelo llenarla mucho. Me suelo meter con ellas y cuando termino, ellas siguen jugando con seguridad. Me quedo en la habitación por precaución, pero las dejo a su rollo. Juegan muy a gusto cuando no se sienten observadas…
  15. Un concurso de disfraces. Abril no era mucho de disfrazarse, pero a Emma le encantan. A Abril lo que le apasiona son los pintacaritas. Cristina de Froggies me dió un curso y soy una experta. O casi 🙂 Hoy juegan mucho a disfrazarse, la grande disfraza a la chica, a veces se maquillan. Una vez con maquillaje de teatro. El siguiente paso fue el punto anterior. Y scotch brite XD.

  16. Elaborad un teatrillo de marionetas, pueden ser marionetas compradas o calcetines rotos, puede ser un teatrillo espectacular de madera o cartón DIY o en el aire. Las voces estridentes y las sorpresas inesperadas que dan besos y mordiscos de repente es todo lo que necesitan 🙂
  17. Juegos de mesa: Para niños un poco más mayores, jugar a las cartas, a juegos de rol, a juegos clásicos tipo oca y parchís. Con los chiquitines se pueden intentar juegos de cartas grandes y jugar a  emparejar las familias…
  18. Dejales que se aburran. ¡Es vital para el aprendizaje! No tenemos que llenar toda la vida de nuestros hijos de entretenimiento, como padres podemos organizar un ambiente preparado; pero es agotador y poco recomendable dirigir cada momento de su vida. Si el aburrimiento se traduce en conflicto, guía y reconduce. Practica a diario, el primer día será un desastre, el siguiente será mucho mejor y finalmente serán autónomos la mayor parte del tiempo.
  19. Dales un buen ejemplo. Si no quieres que tus hijos vean la tele, no la veas tú.. O mejor aún desenchúfala y guárdala detrás del sofá, como hizo Celia de Ahora Soy Mamá. Parece sencillo de decir y difícil de hacer, ¿verdad? Mi asignatura pendiente son las pantallas. Entono un mea culpa en letras de neón.. Estoy empezando a apagar el móvil cuando estoy en casa, pero sigo haciendo fotos de las niñas con la tablet. En la peli  La vida secreta de Walter Mitty, el fotógrafo de éxito dice que a veces se concentra tanto en disfrutar el momento que prefiere no hacer la fotografía. Es mi reto personal para este año. Por si alguien lo duda, no lo estoy consiguiendo XD pero me lo estoy trabajando 🙂
  20. Usa la tele pero no de canguro: Si realmente estás agotado y nada de lo anterior funciona, poned la tele, elegid juntos una peli (mejor una peli porque no tiene anuncios) y acurrucaos en el sofá. Intenta que no la vean ellos solos y tampoco a la hora de comer. Desde el agotamiento aún podéis comentad la peli, que pasará, describir los personajes, preferencias…(a algunos niños eso no les va y les encanta estar brincando de un lado a otro, pero podéis seguir hablando de la película).  Después anímales a hacer un dibujo o una actividad relacionada (Pinterest está lleno de actividades relacionadas con Frozen, pero no las conozco porque por suerte o por desgracia a Abril le da mucho miedo).  Y sobre todo elegid dibujos adecuados (os dejo este enlace). Aquí entono otro mea culpa porque a Abril le encantaba ver el verano pasado los dibujos de Hora de Aventuras y si no fuera porque la princesa es una súper científica, se me ocurren pocos dibujos igual de inadecuados. Reconozco que a los mayores nos gustaban y los veíamos muy a gusto con ella. ¿Veis como no soy radical? ¡Si conozco Hora de Aventuras!
 En esta página tenéis muchísimos recursos clasificados por tipo de actividad:
Que el hilo musical de la casa no sea la televisión sino las risas de los niños felices.
¿Tenéis más ideas para evitar la tele?

¡Espera un momentito!

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